Ir ao artigo em português

Hace cien años  se realizó el Congreso Nacional Feminista en Panamá, un evento histórico trascendental,  cuyo  valor radica en haber puesto los cimientos que impulsaron los reclamos sociopolíticos en favor de los derechos de las mujeres de todo el país, a través de una herramienta  política estratégica :  “Su objetivo era  aprobar la fundación del Partido  Feminista Nacional” (Marco Serra, 2007).

El Congreso Nacional Feminista fue la expresión de  la militancia de muchas mujeres  que desde finales de la primera década del siglo XX habían hecho conciencia de la discriminación sexista y que iniciada la segunda década cobraron más fuerza,  convirtiéndose en un motor presencial de las demandas democráticas, en particular el ejercicio del sufragio universal, que luego fue ejercido por primera vez en la elección de la Asamblea Nacional Constituyente de 1945 y finalmente quedó establecido en la Constitución  de 1946.

Dicho Congreso da inicio el 20 de septiembre de 1923, realizándose  la  sesión inaugural en el espacio denominado  Centro de Estudios Sociales. Las sesiones siguientes, del 21 al 25, se desarrollaron en un emblemático lugar, las instalaciones de los Talleres Escuelas.

Los Talleres Escuelas era un sitio de educación popular, donde iban maestras feministas  a dictar  clases a las mujeres obreras y de los sectores populares. Su creación había sido una aspiración de las obreras, haciéndose realidad el  20 de diciembre de 1921, cuando  la Federación Obrera de la República de Panamá los aprueba.  Desde esa fecha hasta 1935  fue dirigido por una pionera del sindicalismo panameño, la modista Julia Palau de Gámez, quien fue asignada como  directora general del  equipo directivo del cual también formaron parte nueve distinguidas sindicalistas: “…Directoras de Subdivisión: Leonor E. viuda de Hernández,  Delfina del C. González, Florencia Azcárate, Sabina Azcárate, Hildaura Algandona, Josefa Arboleda, Martina Amador, Ana Emilia Calderón, Eufemia Peña. (El Obrero, Feb1922:4)”. (Gutiérrez & Candanedo, 1997).

Los Talleres Escuelas tenían una ubicación muy apropiada y céntrica, por lo que era fácil llegar hasta ese espacio, tal cual ha quedado registrado en la historia:  El local de dichos Talleres-Escuelas se encontraba en Avenida B, en donde hoy está la Escuela República de México.” (Gutiérrez & Candanedo, 1997)

Las trabajadoras sindicalizadas fueron las primeras en organizarse y posicionar las reivindicaciones  de las mujeres, con un programa  que incluía el derecho al sufragio femenino, tal y como está evidenciado en una selecta bibliografía de obligatoria consulta:   existen registros de la formación del primer gremio obrero femenino el 11 de agosto de 1921,  denominado  “Unión Obrera Femenina de la República de Panamá”. (Gutiérrez & Candanedo, 1997).

Desde sus inicios, se sintió el activismo de las lideresas sindicales en el gremio que aglutinaba a varios sindicatos, “en julio de 1921 se funda la Federación Obrera  de la República  de Panamá que promovía la participación  de mujeres de la clase trabajadora  en su seno , y que fue  la primera organización  que proclamó en su programa  como objetivo importante “ …tratar de establecer el sufragio femenino…” (Marco Serra, 1977).

En el marco de la conmemoración del centenario del  Congreso Nacional Feminista, es preciso recordar estos antecedentes que forjaron las precursoras del movimiento sindical panameño, sus aportes y los fuertes lazos que establecieron con las nuevas militantes del feminismo sufragista panameño,  en sus justas reivindicaciones. 

La organización convocante del congreso 

Las lideresas obreras que  recibían en los Talleres Escuelas a ese notable grupo de maestras que les impartían formación en distintas temáticas, consolidaron sus nexos con el  colectivo que convocó al  primer Congreso Nacional Feminista que se realizaba en el istmo panameño, al cual apoyaron en su cometido, el  Centro Feminista Renovación, considerado como  la  primera organización sufragista (Marco Serra, 1977). 

El Centro Feminista Renovación (CFR)  surge a la luz pública el 16 de diciembre de 1922, con Clara González como su presidenta,  quien ya era aliada de Julia Palau de Gámez y las sindicalistas  que  reivindicaban los derechos sociales, económicos y políticos de las mujeres en Panamá. Acompañaron a la primera abogada panameña en la directiva del  CFR  las destacadas lideresas Elida Campodónico de Crespo, primera vicepresidenta; secretaria, Sara Barrera, y Enriqueta Morales, tesorera.” (Samudio, 2023).

Foto: Anayansi Turner

En este contexto, no fue una coincidencia que las sesiones del  Congreso Nacional Feminista se realizaran en los Talleres Escuelas, sino una muestra del espíritu solidario que las unía para juntar esfuerzos ante el nuevo escenario que les deparaba la vida pública. 

De acuerdo a los registros y estudios realizados hasta ahora, la principal lideresa que impulsó la creación del CFR,  Clara González, que en 1922 había sustentado con firmeza su tesis de licenciatura “La Mujer ante el Derecho Panameño”,   tenía muchas razones y motivaciones para emprender las proezas  iniciadas. Entre otros motivos, “que la causa principal  de esa organización y de su fundación, la había motivado el proyecto de ley presentado con una orientación pro femenina  por el diputado chiricano  Rosendo Jurado Venero, a la Asamblea Nacional en el cual se contemplaba el reconocimiento del sufragio femenino.” (Samudio, 2023).

Fechas y principales resultados 

El Congreso Nacional  Feminista  generó grandes expectativas en la sociedad  panameña, al efectuarse entre el 20 y 25 de septiembre de 1923, con 44 participantes que representaron a la mayoría de las provincias,  menos  Chiriquí  y Coclé que no tuvieron delegadas. Las militantes debatieron y tomaron  decisiones clave en este gran acontecimiento sociopolítico e histórico del país.

El contexto internacional del momento estaba impregnado de los logros que había obtenido  el sufragismo como movimiento, ya que en algunos países  las sufragistas habían conquistado el sufragio universal en 1920.  Por esas fechas, en Panamá, las mujeres no tenían siquiera  el derecho a optar por la  cédula de identidad personal, ni siquiera se podía ejercer una  profesión distinta a las tradicionales.

Luego de todo un proceso de organización colectiva y llegada la fecha inaugural, la presidenta del CRF, presenta  el informe del  colectivo feminista convocante a las congregadas  e instala la junta directiva aprobada que  presidirá el Congreso Nacional Feminista: Después de una pieza por la Banda, la Licenciada señorita Clara González dio lectura a un mensaje que en nombre del Centro Feminista Renovación presentaba al Congreso con el fin de ilustrar a sus miembros sobre el objeto del mismo. Después de esto procedió a dar posesión  a las dignataria que resultaron elegidas.” (Campodónico de Crespo, 1926).

Las delegadas también aprobaron  la directiva que presidió el Congreso:   Linda Smart,  de la provincia de Colón, como presidenta; Felicidad Hauradou, por la provincia de Bocas del Toro, vicepresidenta; Carlota Calvo, secretaria y Carmen Yanes, subsecretaria, ambas en representación de la provincia de Panamá. 

Foto: Anayansi Turner

El trabajo realizado por las delegadas del Congreso Nacional Feminista tuvo una intensa producción y se logró  concretar tres puntos clave para la consolidación organizativa  del naciente PNF y una propuesta electoral:  “en las sesiones realizadas en los Talleres Escuelas para Mujeres, se aprobaron  el Programa, la Constitución  y el nuevo Directorio  Nacional del Partido , así como lanzar a Clara González  como candidata a diputada  de la Asamblea Nacional.”  (Turner, 2006).

Siendo aprobado el objetivo estratégico del  Congreso, la creación del Partido Nacional Feminista (PNF), su  Directorio Nacional quedó compuesto por  Clara González, como presidenta; Zoraida Díaz de Schtrom, elegida como vicepresidenta y fueron electas  tres  vocales,  Elena Tejada, la sindicalista Julia Palau de Gámez y Benilda Zamora. 

El Congreso Nacional Feminista, le dio  un impulso desde su inicio al PNF. De la propia voz de  Clara González en su disertación de apertura, se sustentó  la necesidad de su creación y composición: “que cuente en su seno a todas las mujeres del país, cuyos fines sean los de luchar con ahínco por la regeneración social de la mujer, su emancipación política , propender a su perfeccionamiento moral, y echar por tierra su dependencia económica como también los prejuicios  que lejos de llevarla  hacia la meta de sus aspiraciones, le imprimen una dinámica de nefasto retrocesos”. (Marco Serra, 2007)

El PNF jugó un papel trascendental para obtener muchas de las conquistas que hoy tenemos. Sin embargo, hay evidencias de que en las décadas siguientes confrontaron persecución y despidos de maestras por su militancia, de parte del poder político patriarcal que se negaba a reconocer los derechos democráticos y una  ciudadanía plena para las mujeres.

Investigación científica, conocimiento y visibilidad  histórica

Este centenario del Congreso Nacional Feminista lo conmemoramos con más conocimiento acerca de la participación de las mujeres en las primeras cuatro décadas del siglo XX en Panamá.  Ya no son invisibles las que abonaron el camino  y  legaron tantos derechos.  Esa ilustración es producto de acuciosas investigaciones realizadas por una pléyade de  científicas sociales y militantes feministas de este istmo, que han estado desempolvando los hechos  no contados por la historia oficial, con base al método científico, clave  para los análisis de género.  

Se ha logrado poner  en la palestra pública a las principales  protagonistas de la verdadera historia  sociopolítica del país, y las nuevas generaciones la están conociendo para defender las conquistas obtenidas y continuar alcanzando otros derechos pendientes, que se han convertido en verdaderos retos. 

Quienes quieran conocer más sobre el antes, durante y después del Congreso Nacional Feminista, realizado hace cien años en este país,  es ineludible asistir a  la principal Memoria Histórica del país, la Biblioteca Nacional, como a los Archivos Nacionales. Allí están los  principales recursos hemerográficos, como la producción bibliográfica de las científicas sociales y militantes feministas, que han radiografiado con lentes de género, una parte esencial de la historia vivida por la mitad de la población, para conocer y comprender el contexto vivido por las mujeres,  en las primeras cuatro décadas del siglo XX. 

Los estudios conllevan a  descubrir los hechos sociopolíticos y la situación relativa a la desigualdad de género,  quiénes se opusieron a los reclamos por la igualdad de condiciones de las mujeres en el istmo de Panamá y compararlo con lo que acontece actualmente.  Sin duda, surgirán muchas preguntas, entre otras,  ¿Cómo actuaron los presidentes de la época?,  ¿Cuál era la postura de los Diputados en  la Asamblea Nacional, se parecen a los y las actuales?, ¿Qué diputados las apoyaron y cuáles las objetaban? ¿Qué presidente mandó a despedir maestras y perseguir lideresas? ¿Por qué no se pudo realizar un Segundo Congreso Nacional Feminista?  Se sorprenderán de las respuestas y los personajes.

En síntesis, a cien años del Congreso Nacional Feminista,  es impostergable reconocer los méritos,  el honor y la valentía de las feministas que se congregaron a visualizar un país con equidad e igualdad.  Un paso primordial para construir la verdadera democracia participativa,  que haga posible una vida digna con soberanía total en todo el territorio istmeño. 

Referencias

Campodónico de Crespo, E. (1926). Centenario del Congreso de Bolóvar 1826-1926. Recuerdo del Partido Nacionla Feminista. A las Delegadas del Congreso Inter-Americano de Mujeres. Panamá: Tipografía y Casa Editorial «La Moderna». Obtenido de http://bdigital.binal.ac.pa/bdp/Partido%20Nacional%20Feminista.pdf

Gutiérrez, M., & Candanedo, J. (1997). Un Siglo de Liderazgo Femenino en Panamá.Un Enfoquee Histórico Sociológico. Panamá.: Servicio de Paz y Justicia, Ia. Edición.

Marco Serra, Y. (1997). El Feminismo de los Años Veinte y la Redefinición de la Femineidad en Panamá. En E. Rodrígue Sáenz, & E. Rodríguez Sáenz (Ed.), Entre Silencios y Voces. Género e Historia en América Central (1750-1990). San Jose, Costa Rica: Centro Nacional para el Desarrollo de la Mujer y la Familia.

Marco Serra, Y. (2007). Clara González de Behringuer. Biografía. Panamá: Edición Hans Roeder.

Samudio, E.Modernidad en Panamá (1907-1947). Editora Novo Art, Ed. Panamá: SENACYT.

Turner, A. (2006). Clara González, La Mujer del Siglo. (Selección de Escritos) (Primera Edición ed.). Panamá: Imprenta Articsa.

.
Foto: Olmedo Beluche

O Centenário do Congresso Nacional Feminista no Panamá, 1923-2023

Tradução: Amanda Martínez

Há cem anos, foi realizado no Panamá o Congresso Nacional Feminista, um evento histórico transcendental, cujo valor reside no fato de ter lançado as bases que impulsionaram as demandas sociopolíticas pelos direitos das mulheres em todo o país, por meio de uma ferramenta política estratégica: «Seu objetivo era aprovar a fundação do Partido Nacional Feminista» (Marco Serra, 2007).

O Congresso Nacional Feminista foi a expressão da militância de muitas mulheres que, desde o final da primeira década do século XX, haviam se conscientizado da discriminação sexista e que, no início da segunda década, ganharam mais força, tornando-se o motor das reivindicações democráticas, em especial o exercício do sufrágio universal, que mais tarde foi exercido pela primeira vez na eleição da Assembleia Nacional Constituinte de 1945 e foi finalmente estabelecido na Constituição de 1946.

O Congresso começou em 20 de setembro de 1923, com a sessão inaugural realizada no Centro de Estudos Sociais. As sessões seguintes, do dia 21 ao dia 25, foram realizadas em um local emblemático, as instalações do Talleres Escuelas.

O Talleres Escuelas era um local de educação popular, onde professoras feministas ministravam aulas para trabalhadoras e mulheres dos setores populares. Sua criação foi uma aspiração das trabalhadoras e se tornou realidade em 20 de dezembro de 1921, quando a Federação Operária da República do Panamá a aprovou.  Daquela data até 1935, foi dirigida por uma pioneira do sindicalismo panamenho, a modista Julia Palau de Gámez, que foi designada como diretora geral da equipe de gestão, da qual também faziam parte nove ilustres sindicalistas: «… Diretoras de subdivisão: Leonor E. viuda de Hernández, Delfina del C. González, Florencia Azcárate, Sabina Azcárate, Hildaura Algandona, Josefa Arboleda, Martina Amador, Ana Emilia Calderón, Eufemia Peña. (El Obrero, fevereiro de 1922:4)». (Gutiérrez & Candanedo, 1997).

Os Talleres Escuelas tinham uma localização muito conveniente e central, por isso era fácil chegar lá, conforme registrado na história: «As instalações desses Talleres-Escuelas ficavam na Avenida B, onde hoje está a Escola República do México» (Gutiérrez & Candanedo, 1997). 

As trabalhadoras sindicalizadas foram as primeiras a organizar e posicionar as demandas das mulheres, com um programa que incluía o direito ao sufrágio feminino, conforme evidenciado em uma seleta bibliografia de consulta obrigatória: «há registros da formação do primeiro sindicato de trabalhadoras em 11 de agosto de 1921, chamado » União Operária Feminina da República do Panamá» (Gutiérrez e Candanedo, 1997). 

Desde o início, o ativismo das mulheres líderes sindicais se fez sentir na união que reunia vários sindicatos: «em julho de 1921, foi fundada a Federação Operária da República do Panamá, que promoveu a participação das mulheres da classe trabalhadora em suas fileiras e que foi a primeira organização a proclamar em seu programa como um objetivo importante «… tentar estabelecer o sufrágio feminino…» (Marco Serra, 1977).

No âmbito da comemoração do centenário do Congresso Nacional Feminista, é necessário relembrar o histórico das precursoras do movimento sindical panamenho, suas contribuições e os fortes vínculos que estabeleceram com as novas militantes do feminismo sufragista panamenho, em suas justas reivindicações.

A organização que convocou o congresso 

As líderes trabalhadoras que receberam no Talleres Escuelas esse notável grupo de professoras que lhes proporcionou formação em diferentes matérias, consolidaram seus vínculos com o coletivo que convocou o primeiro Congresso Nacional Feminista a ser realizado no istmo panamenho, o qual elas apoiaram nesse empreendimento, o Centro Feminista de Renovação, considerado a «primeira organização sufragista» (Marco Serra, 1977).

O Centro Feminista de Renovação (CFR) veio a público em 16 de dezembro de 1922, com Clara González como presidenta, que já era aliada de Julia Palau de Gámez e dos sindicalistas que exigiam os direitos sociais, econômicos e políticos das mulheres no Panamá. Acompanhando a primeira advogada panamenha na diretoria do CFR, estavam as destacadas líderes femininas «Elida Campodónico de Crespo, primeira vice-presidenta; a secretária, Sara Barrera, e Enriqueta Morales, tesoureira» (Samudio, 2023). (Samudio, 2023).

Foto: Anayansi Turner

Nesse contexto, não foi uma coincidência o fato de as sessões do Congresso Nacional Feminista terem sido realizadas no Talleres Escuelas, mas sim um sinal do espírito de solidariedade que as uniu para unir forças diante do novo cenário que a vida pública lhes reservava.

De acordo com os registros e estudos realizados até o momento, a principal líder que promoveu a criação do CFR, Clara González, que em 1922 havia apoiado firmemente sua tese de graduação » A Mulher diante do Direito Panamenho», tinha muitas razões e motivações para realizar as ações que havia iniciado. Entre os motivos, «que a principal causa dessa organização e de sua fundação havia sido incentivada pelo projeto de lei apresentado com uma orientação pró-mulher pelo deputado de Chirica, Rosendo Jurado Venero, à Assembleia Nacional, no qual se contemplava o reconhecimento do sufrágio feminino» (Samudio, 2023).

Datas e principais resultados

O Congresso Nacional Feminista gerou grandes expectativas na sociedade panamenha, realizado entre 20 e 25 de setembro de 1923, com 44 participantes representando a maioria das províncias, exceto Chiriquí e Coclé, que não tinham delegadas. As militantes debateram e tomaram decisões importantes nesse grande evento sociopolítico e histórico do país.

O contexto internacional da época estava impregnado das conquistas do sufragismo como movimento, já que em alguns países as sufragistas haviam conquistado o sufrágio universal em 1920.  Naquela época, no Panamá, as mulheres não tinham sequer o direito de optar por uma carteira de identidade pessoal, nem podiam exercer uma profissão que não fosse a tradicional.

Depois de todo um processo de organização coletiva e da chegada da data inaugural, a presidenta do CRF apresentou o relatório do coletivo feminista que havia convocado a congregação e instalado a diretoria aprovada que presidiria o Congresso Nacional Feminista: «Depois de uma peça da Banda, a Srta. Clara González leu uma mensagem que, em nome do Centro Feminista Renovação, apresentou ao Congresso com o objetivo de esclarecer aos seus membros o propósito do mesmo. Depois disso, ela procedeu ao juramento das dignitárias eleitas«. (Campodônico de Crespo, 1926).

As delegadas também aprovaram a mesa diretora do Congresso: Linda Smart, da província de Colon, como presidenta; Felicidad Hauradou, da província de Bocas del Toro, vice-presidenta; Carlota Calvo, secretária e Carmen Yanes, vice-secretária, ambas representando a província do Panamá.

Foto: Anayansi Turner

O trabalho realizado pelas delegadas do Congresso Nacional Feminista teve uma produção intensa e foram alcançados três pontos-chave para a consolidação organizacional do nascente PNF e uma proposta eleitoral: «nas sessões realizadas nas Oficinas das Escolas para Mulheres, foram aprovados o Programa, a Constituição e o novo Diretório Nacional do Partido, bem como o lançamento de Clara González como candidata a deputada na Assembleia Nacional» (Turner, 2006). 

Foi aprovado o objetivo estratégico do Congresso, que era a criação do Partido Nacional Feminista (PNF), e seu Diretório Nacional foi composto por Clara González, como presidenta; Zoraida Díaz de Schtrom, eleita como vice-presidenta; e três membros foram eleitas: Elena Tejada, a sindicalista Julia Palau de Gámez e Benilda Zamora.

O Congresso Nacional Feminista deu um impulso ao PNF desde o início. Clara González, em sua própria voz no discurso de abertura, apoiou a necessidade de sua criação e composição: «incluir todas as mulheres do país, cujos objetivos são lutar arduamente pela regeneração social da mulher, sua emancipação política, promover seu aperfeiçoamento moral e romper sua dependência econômica, bem como os preconceitos que, longe de conduzi-las ao objetivo de suas aspirações, as colocam em uma rota de retrocessos desastrosos» (Marco Serra, 2007). 

A PNF desempenhou um papel transcendental na obtenção de muitas das conquistas que temos hoje. No entanto, há evidências de que, nas décadas seguintes, elas enfrentaram perseguição e demissão de professoras por sua militância por parte do poder político patriarcal que se recusava a reconhecer os direitos democráticos e a cidadania plena das mulheres.

Pesquisa científica, conhecimento e visibilidade histórica

Comemoramos este centenário do Congresso Nacional Feminista com mais conhecimento sobre a participação das mulheres nas primeiras quatro décadas do século XX no Panamá.  Aquelas que abriram o caminho e legaram tantos direitos não são mais invisíveis.  Esta ilustração é o produto de uma pesquisa minuciosa realizada por um grande número de cientistas sociais e ativistas feministas deste istmo, que têm tirado o pó dos fatos não contados pela história oficial, com base no método científico, fundamental para a análise de gênero.

As principais protagonistas da verdadeira história sociopolítica do país foram trazidas à cena pública, e as novas gerações estão conhecendo-as para defender as conquistas obtidas e continuar alcançando outros direitos pendentes, que se tornaram verdadeiros desafios.

Quem quiser saber mais sobre o antes, o durante e o depois do Congresso Nacional Feminista, realizado há cem anos neste país, não deve perder a oportunidade de visitar a principal Memória Histórica do país, a Biblioteca Nacional, bem como o Arquivo Nacional. Ali se encontram os principais recursos jornalísticos, como a produção bibliográfica de cientistas sociais e ativistas feministas, que radiografaram, com uma lente de gênero, uma parte essencial da história vivida por metade da população, para conhecer e entender o contexto vivido pelas mulheres nas primeiras quatro décadas do século XX.

Os estudos levam a descobrir os fatos sociopolíticos e a situação da desigualdade de gênero, quem se opôs às exigências de igualdade de condições para as mulheres no Istmo do Panamá e compará-los com o que acontece hoje.  Sem dúvida, surgirão muitas perguntas, tais como: Como agiam os presidentes da época, qual era a posição dos deputados na Assembleia Nacional, se eles se assemelham aos atuais, quais deputados os apoiavam e quais se opunham a eles, qual presidente mandou demitir professoras e perseguiu líderes mulheres, por que não foi possível realizar um Segundo Congresso Nacional Feminista?  Você se surpreenderá com as respostas e os personagens.

Em suma, cem anos após o Congresso Nacional Feminista, é urgente reconhecer os méritos, a honra e a coragem das feministas que se uniram para vislumbrar um país com equidade e igualdade.  Um passo fundamental para a construção da verdadeira democracia participativa, que possibilitará uma vida digna com total soberania em todo o território istmiano.

Referências

Campodónico de Crespo, E. (1926). Centenario del Congreso de Bolóvar 1826-1926. Recuerdo del Partido Nacionla Feminista. A las Delegadas del Congreso Inter-Americano de Mujeres. Panamá: Tipografía y Casa Editorial «La Moderna». Obtenido de http://bdigital.binal.ac.pa/bdp/Partido%20Nacional%20Feminista.pdf

Gutiérrez, M., & Candanedo, J. (1997). Un Siglo de Liderazgo Femenino en Panamá.Un Enfoquee Histórico Sociológico. Panamá.: Servicio de Paz y Justicia, Ia. Edición.

Marco Serra, Y. (1997). El Feminismo de los Años Veinte y la Redefinición de la Femineidad en Panamá. En E. Rodrígue Sáenz, & E. Rodríguez Sáenz (Ed.), Entre Silencios y Voces. Género e Historia en América Central (1750-1990). San Jose, Costa Rica: Centro Nacional para el Desarrollo de la Mujer y la Familia.

Marco Serra, Y. (2007). Clara González de Behringuer. Biografía. Panamá: Edición Hans Roeder.

Samudio, E.Modernidad en Panamá (1907-1947). Editora Novo Art, Ed. Panamá: SENACYT.Turner, A. (2006). Clara González, La Mujer del Siglo. (Selección de Escritos) (Primera Edición ed.). Panamá: Imprenta Articsa.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.